Los protectores bucales para deportistas, también conocidos como guardas bucales, son un aditamento empleado en la práctica de deportes de contacto como el fútbol, el hockey o el rugby cuya finalidad es la evitar golpes en los dientes. ¿Por qué son una parte importante del equipamiento deportivo? ¿Qué tipos existen? ¿Cómo se cuida un protector bucal?
¿Qué es un protector bucal para deportistas?
Ciertos deportes pueden ser considerados de riesgo por la posibilidad de lesiones que implica ya que los golpes, las caídas y las lesiones suelen hacer acto de presencia. Por eso muchos deportistas optan por usar un protector bucal con el fin de evitar roturas o incluso pérdidas de piezas dentales.
Por lo tanto, la función de los protectores bucales es la de amortiguar los posibles golpes y así, conservar en buen estado dientes y tejidos blandos.
En qué casos se recomiendan los protectores bucales para deportistas
Según la Sociedad Española de Odontología del Deporte (SEOD) los protectores bucales están recomendados en personas que practiquen deportes de alto riesgo o contacto: boxeo, rugby, hockey entre otros, así como para deportistas que lleven a cabo actividades consideradas de riesgo intermedio: baloncesto, waterpolo, balonmano, paracaidismo, buceo o similares.
Tipos de guardas bucales deportivos
Distinguimos los siguientes tipos de protectores dentales para deportistas:
- Protectores bucales hechos a la medida del paciente. Se toma la medida del paciente sobre un molde y posteriormente se confecciona el protector en el laboratorio. Este tipo de protectores se adaptan perfectamente a la dentadura del paciente ya que respetan la oclusión y, además de ser cómodos, son muy resistentes.
- Guardas bucales tipo modelado. En el caso de los protectores modelados, ya vienen preformados, cuando se vayan a usar deben ser hervidos para después poner en la boca, dar la mordida y coger la forma de la dentadura del paciente.
- Protectores bucales convencionales. Más económicos que los anteriores, al no estar hechos a medida, también son menos duraderos. El protector se presenta ya preformado y listo para ser usado por el deportista.
Cuidados y limpieza de las guardas bucales de deporte
Al igual que suele suceder con otros tratamientos de odontología, en el caso de los protectores también tendremos en cuenta una serie de cuidados para que se mantenga siempre en las mejores condiciones:
- Lavado tras cada uso con un cepillo algo más duro, tipo de uñas, agua fría y jabón neutro. Deja secar antes de guardar para evitar la humedad y la formación de hongos.
- Una vez a la semana se debe sumergir el protector en un vaso con agua junto a una pastilla específica para higienizar prótesis dentales.
- Cuando no se vaya a usar se ha de guardar en su estuche o caja original alejado de la luz directa del sol, así como de las altas temperaturas.
- Es aconsejable llevarlo de vez en cuando al odontólogo, puedes aprovechar el momento de la revisión anual, para comprobar que está en buen estado. Recuerda que los guardas bucales se deben reemplazar cada cierto tiempo dependiendo de su desgaste por el uso.
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